Me llega por correo electrónico un interesante documento, que reproduzco aquí con permiso de su titular (gracias).
A mí también me dio risa al principio, pero cuando te imponen gratuitamente, por ignorancia o comodidad (y sin base legal alguna), un formato propietario, conculcándote tus derechos, ya no es tan gracioso.
Hay pueblos que no hacen honor a su apellido.