Política comercial

Una empresa, tras adquirir software propietario legalmente, recibe esta carta a los pocos meses. Por si no se lee muy bien, en la página segunda se habla de un armisticio de cuatro meses en el que se comprometen a no emprender ninguna acción legal contra aquellas empresas que se hayan puesto en contacto con dicha entidad y hayan empezado a regularizar/legalizar su situación, aún cuando tuvieran constancia de situaciones irregulares o comisión de infracciones por parte de la empresa.

Fue tan bien acogida que se pasaron a Linux y a otras aplicaciones libres.

Me recuerda que hace un año me llamó un cliente de Barcelona diciéndome que había recibido otra carta, esta vez de la BSA, en la que se le requería para que relacionara los programas informáticos y las licencias que tenía instalados en sus equipos informáticos y, caso de no hacerlo, se exponía a que el nombre de la empresa fuera publicado en una lista de entidades no colaboradoras con su campaña, así como a que se iniciaran las investigaciones correspondientes para el descubrimiento de programas informáticos ilegales en sus instalaciones.